El tema debe tener coneccion emocional con el estudiante y si no es el tema, por lo menos el docente, aprendemos mas facilmente lo que nos resulta significativo (la amigdala cerebral reacciona a lo desconocido tratandolo como peligroso y bloquea la entrada al neocortex). Esta funcion actúa como un filtro que es más efectivo antes de los 20 años debido a que los lóbulos frontales no maduran hasta esta edad. Antes del aprendizaje los estudiantes realizan un monitoreo emocional del tema, del ambiente y de quién emite el mensaje, que influye positiva o negativamente en la manera de aprehender el tema. En la gráfica vemos la ubicacion del cerebro emocional, con la cual actuamos en la infancia, la parte racional o neocortex va madurando progresivamente.Es por esto que una experiencia negativa con el docente o con la materia como un regaño o una mala nota, dependiendo como se maneje, puede generar reacciones ante la materia y esto se refleja en los resultados académicos.